Llegó el verano, ¡wipiti!
Mientras algunos buscan vacacionar, otros padres tienen la tediosa tarea de buscar un campamento de verano para sus hijos. ¡Y eso que todavía no se han recuperado del trajín de las graduaciones, y la lista del back to school!
Ya con este primer párrafo, les recuerdo otro beneficio de ser abuelos jóvenes: ¡ya salimos de esos “trajines”!
Esto me llevó a analizar lo complicado que es para los padres la búsqueda de un campamento de verano para sus hijos. Mientras lo analizaba, las frases que retumban en mi cabeza eran: “Busca algo cerca”, “que los saque de los teléfonos y videojuegos”, “que sea en un horario conveniente” y sobre todo, “que sea de confianza”.
TE PODRÍA INTERESAR: A panty quitao
Las incógnitas continuaban…“¿Habrá muchos niños?”, “la atención, ¿como será? , “¿estarán cómodos?, “¿tendrá buenas actividades?, “la comida, ¿será buena y saludable?”, “¿será divertido?”, “¿será organizado?”…
Surgen más pregunta que el FBI con el acusado (frente a un polígrafo).
Señoras y señores. Hijos e hijas mías… ¡No se compliquen! Les tengo buenas noticias. Les presento al mejor campamento de verano, de la vida, and ever! ¡Bienvenidos a Abuelitis Summer Camp! El que cumple con cada uno de esos requisitos.
¿Si es seguro? Sí lo es, ¿es confiable? Sí lo es. ¿es Saludable? Sí que lo es.
Ah, y ¡nos hacemos responsables de algunas calorías que se cuelen de más! En muchos de estos campamentos, se ha eliminado la palabra “NO”. Eso sí, somos expertos en “alcahueterías”. Cualquier referido, solo pregunten con los que saben… ¡Los abuelos! Y aquí me incluyo.
Díganme si es cierto o no que uno de los mejores lugares para que su hijo la pase bien es precisamente en el hogar de sus abuelos. No creo que ningún abuelo me diga lo contrario.
Somos felices al recibirlos y estamos listos para pasarla súper. Cocinamos rico, tenemos energías de sobra, la paciencia nos llega con la madurez en los años y, ¿sabes qué? Aún bailamos regueton, aunque nos tenga que recoger del piso al minuto de la canción.
Les cuento brevemente. Soy abuela joven, soy “workaholic”, muy maniática con la limpieza y la organización, con un estilo de vida súper activo.
TE RECOMENDAMOS: El hot flash
Apenas tengo tiempo para respirar, soy muy selectiva con mi alimentación y los ejercicios; digamos que me gusta los colores claros.
En mi apartamento todo es blanco: paredes, sofá, cojines, a penas recibo visitas; y hace mucho que no recibo infantes ni niños pequeños, porque siempre soy quien los visita.
Cuando mi hija me dice que no ha podido conseguir un campamento de verano, que se suma a todo el revolú del trabajo, la casa y los nenes, la mitad de mi cerebro (la emocional), ya gritaba con entusiasmo “¡Sí, sí, si!”, mientras la otra mitad (lógica), me decía “NO, no, no”.
Aunque ustedes no lo crean, ese momento lo añoré. Estaba loca que mi hija me dijera “¿te puedes quedar con Alejandro?”
¡Mis deseos de quedarme con mi nieto, en mi casa, mas de una noche, se me estaba volviendo realidad! Dije un ‘Sí’, tan convencido como el ‘sí’ que le dio Megan al príncipe Harry.
“Sí, ¡yo me quedo con mi nieto!”, mientras sacudía mi cabeza, para olvidarme de los bellos cojines blancos, que dejarían el lujo para volverse abanicos o alfombra.
Llegó la temporada en la que el color blanco se transforma a un elegante beige.
SI TE INTERESA: VÍDEO: Dagmar es una abuela feliz
Si le sumamos los “spidermans” por la ducha, un karaoke mañanero, y la dulce voz que dice “brinca mamá Nory, brinca”. Podrían pasar dos cosas: O yo salgo experta en conocer superhéroes del momento o Alejandro se vuelve el nuevo actor, animador, y locutor vegetariano más joven de la historia. Sea cual sea, de seguro disfrutará del mejor Summer Camp que haya vivido a sus sajorines cuatro años, aunque exige como si tuviera 15.
Demás esta decir que la euforia, al enterarse de sus nuevas vaciones, fue lo mas parecido cuando visitó a Disney por primera vez y no lo culpo.
No me parezco a Mickey Mouse, pero esta abuelita cuarentona, es cool, agradable, complaciente, amorosa, vigila cada segundo de su seguridad y también cocina rico y saludable.
Puedo llegar a la mentalidad de los cuatro años y lo major, todo es libre de costo, la sonrisas van por la casa.
¿Qué pasará en esta gran aventura? Desde ya sigan mis redes sociales en Facebook: @Norelizlatorre_Tv y @AbuelosJóvenes – porque estaré publicando cada eventualidad.
Si fui capaz de traer un peluche gigante desde Los Ángeles, California a Puerto Rico para él, imaginen lo que puedo ser capaz ahora que lo tengo en casa.
Se que habrá mucho trabajo que atender, pero esta vez hay que esperar, porque en el Abuelitis Summer Camp las sonrisas de nuestros nietos, son nuestra prioridad.
Esta columna expresa solo el punto de vista de su autor. NoreLiz LaTorre es actriz, productora y creadora del Concepto y proyecto #AbuelosJóvenes. Puede contactarla a través de norelizlatorrepr.com y su página de Facebook Noreliz LaTorreTV.