Con unos corazones rojos en sus manos, los compañeros de clase de un niño, de 5 años, lo acompañaron a la última de audiencia de su adopción. El juzgado de Grand Rapids, Michigan, se llenó de las risas y travesuras de los pequeños, quienes fueron testigos de cómo Michael fue entregado formalmente a sus padres.
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La tierna escena se vivió con emoción en el tribunal. En medio del acto, la jueza Patricia Gardner preguntó a los amiguitos de Michael qué significaba para ellos. A lo que ellos respondieron: “Amo a Michael” y “Michael es mi mejor amigo”.
Probably the cutest story you will ever see. A kid who’s being adopted invited his ENTIRE kindergarten class to attend his adoption. @wzzm13 pic.twitter.com/tb9WC4tjVO
— James Starks II (@_JamesStarks) December 5, 2019
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Ese día, en el condado de Kent se finalizaron 36 adopciones, entre ellas la del estudiante de la escuela primaria Wealthy en East Grand Rapids. Fue su maestra, Kerry McKee, quien organizó todo.
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Buscó un bus escolar y se llevó a toda su clase hasta el tribunal para darle a apoyo a su alumno. Además su intención es que su clase aprendiera sobre la adopción.
“La familia no tiene que ser la del ADN, la familia es apoyo y amor”, declaró la maestra al ser consultada por los medios.
Un momento viral para un niño feliz
El propio tribunal difundió la foto del momento en su cuenta Facebook y se viralizó de inmediato.
Michael brought his entire kindergarten class with him today to witness his adoption.
Posted by Kent County, Michigan on Thursday, December 5, 2019
“A veces sus viajes han sido muy largos. Han ocurrido milagros, así como cambios para los niños y las familias, y un increíble apoyo de la comunidad, como pueden ver hoy en la audiencia de adopción de Michael”, declaró la jueza Gardner en la audiencia.
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Después de un año, los padres adoptivos del niño lograron obtener su custodia. La pareja, cuyos nombres no fueron revelados, tiene años casados. “No teníamos hijos antes de eso, y las cosas se pusieron bastante caóticas a toda prisa”, comentó.
Durante la audiencia, los padres adoptivos se expresaron orgullosos de su pequeño, de quien dijeron le encanta bailar y nadar, y jugar baloncesto y fútbol.