En Puerto Rico, aproximadamente 30 mil puertorriqueños están afectados por Párkinson y se estima que cerca de 10 millones personas a nivel mundial padecen esta enfermedad, según los datos proporcionados por el Departamento de Salud de Puerto Rico.
Las terapias físicas y del habla son de gran importancia para los pacientes con Párkinson por varias razones: Mejora de la movilidad y el equilibrio, ya que se afecta el control motor y la coordinación muscular.
Las terapias físicas ayudan a mejorar la fuerza muscular, el equilibrio y la movilidad, lo que permite a los pacientes mantener su independencia y reducir el riesgo de caídas.
Por otro lado, el Párkinson puede afectar la capacidad de hablar y tragar debido a problemas con los músculos faciales y de la garganta. La terapia del habla (logopedia) trabaja para fortalecer los músculos involucrados en el habla y la deglución, permitiendo una comunicación más clara y una mejor capacidad para comer y beber.
La Fundación de Parkinson’s (https://www.parkinson.org/) recomienda los siguientes ejercicios:
I- Actividad aeróbica
Tres veces por semana por al menos 30 minutos por sesión de manera continua o intermitente con una intensidad moderada a vigorosa.
Tipo: Actividades rítmicas continuas, como caminar rápidamente, correr, montar bicicleta, nadar y clases de aerobicos.
Consideraciones:
Preocupaciones de seguridad debido al riesgo de quedarse inmóvil, baja presión arterial, respuesta disminuida del ritmo cardiaco. Puede requerir supervisión.
II- Entrenamiento de fuerza
2-3 días no consecutivos por semana con 10-15 repeticiones para los principales grupos musculares; enfoque en resistencia, velocidad, o potencia.
Tipo: Principales grupos musculares de extremidades superiores/inferiores, como
usar máquinas de pesas, bandas de resistencia, pesas ligeras/moderadas o peso corporal.
Consideraciones:
La rigidez muscular o la inestabilidad postural podrían limitar el rango de movimiento.
II- Equilibrio, agilidad y multitareas
2-3 días por semana con integración diaria si es posible.
Tipo: Pasos multidireccionales, cambios de peso, actividades dinámicas de equilibrio, movimientos amplios, multitareas como yoga, tai chi y baile.
Consideraciones:
Preocupaciones de seguridad por problemas cognitivos o de equilibrio. Apóyese en algo estable si lo requiere. Puede requerir supervisión.
IV- Ejercicios de Estiramiento
2-3 días por semana siendo más efectiva la práctica diaria.
Tipo: Estiramiento sostenido con respiración profunda o estiramiento dinámico antes del ejercicio.
Consideraciones:
Puede requerir adaptaciones por postura flexionada, osteoporosis y dolor.