Cuando se trata de configurar el router Wi-Fi en nuestro hogar, es importante tener en cuenta la ubicación para asegurarnos de obtener una conexión estable y rápida en todos nuestros dispositivos. Si bien es común esconder el router e instalarlo en lugares poco visibles, hay una habitación en particular que debemos evitar si queremos evitar problemas de conexión a Internet.
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Según Virgin Media, proveedor de servicios de Internet, la cocina es la peor habitación para poner el router. Aunque puede parecer conveniente tenerlo cerca de la cocina debido a la ubicación central de la casa, esta elección puede afectar negativamente la calidad de la señal.
Como explica Computer Hoy, la cocina suele estar equipada con diversos electrodomésticos de metal pesado, como refrigeradores, hornos y microondas, que pueden interferir con la distribución de la señal de Internet. Además, estos electrodomésticos emiten señales propias que pueden causar interferencias adicionales.
La advertencia de Virgin Media
Virgin Media advierte que este entorno inhóspito para el router puede provocar una señal Wi-Fi débil y velocidades lentas de Internet. Por lo tanto, es recomendable evitar colocar el router cerca de la cocina y de los electrodomésticos que puedan interferir con la señal.
En su lugar, se aconseja ubicar el router en un lugar con pocos dispositivos electrónicos alrededor, alejado de las esquinas y, preferiblemente, en una posición vertical y elevada. Esto ayudará a optimizar la distribución de la señal Wi-Fi y a evitar obstáculos que puedan bloquearla.
Además, para mejorar la cobertura Wi-Fi en hogares más grandes o con múltiples pisos, Virgin Media sugiere considerar la adquisición de un amplificador por separado. Este dispositivo toma la señal inalámbrica del router principal, la amplifica y la retransmite a todos los dispositivos inalámbricos de la casa, evitando así puntos oscuros donde la señal se debilita.
Si bien es importante tener en cuenta estas recomendaciones, cada hogar es único y puede requerir ajustes específicos para lograr la mejor distribución de la señal Wi-Fi. Experimentar con diferentes ubicaciones y configuraciones puede ayudar a optimizar la conectividad en todo el hogar.