El cantante Elvis Crespo dio a conocer recientemente que lleva una vida sin el consumo de bebidas embriagantes tras experimentar una etapa como bebedor problemático.
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En una entrevista con Chente Ydrach, Crespo reflexionó sobre lo feliz que ha llegado a sentirse luego de dejar el alcohol; iniciando esta práctica, narró, tan joven como a los 19 años.
Siendo líder de la comunidad, desde los 15, según este se fue rodeando de muchos adultos que bebían cervezas, por lo que, consecutivamente se volvió consumidor.
“Prefiero estar sobrio y me siento en control”, comentó.
Dijo que, entre los efectos de las bebidas en su cuerpo, vio cómo su estado de ánimo y físico fueron transformándose. Al punto de buscar peleas con otras personas cada vez que bebía.
“Yo me reconcilié con eso. Al Elvis del pasado yo lo amo mucho, yo lo perdoné”, señaló.
Reconoció que aún guarda memorias de todo tipo de esta etapa de su vida y que hoy, a sus 53 años, está mejor sin el alcohol.
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Habla de sus inicios
En la conversación Crespo contó, además, sobre sus inicios en la música, que estuvieron llenos de muchas oportunidades por las que trabajó duro.
Como, por ejemplo, al artista se le ofreció una oportunidad como corista, pero fue descartado por que su voz necesitaba ser entrenada. Ante esto, su mamá se propuso llevarlo a la fama, anotándole en clases intensivas de canto.
Meses después se convirtió en corista y su primera experiencia musical se dio como integrante de un grupo musical que ofrecía sus presentaciones en un crucero.
Habló, también, sobre el origen de su nombre y las similitudes con la súperestrella Elvis Presley.
“Cuando yo fui encontrándome artísticamente y adquiriendo conocimiento, el nombre y mi apellido me ayudó muchísimo. El crespo, en Latinoamérica, hablaba de un pelo rizado y eso era catchy”, dijo.
“Mi nombre me benefició”, puntualizó.