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La Fondita de Jesús: más que un lugar para comer un espacio para transformar vidas

La Fondita de Jesús ha enfrentado retos significativos en los últimos años, reflejo de la crisis socioeconómica que afecta al país.

Almuerzo Acción de Gracia fondita de Jesús
Almuerzo Acción de Gracias Almuerzo de Acción de Gracias La Fondita de Jesús. Foto Dennis A. Jones

En un emotivo evento lleno de gratitud y esperanza, La Fondita de Jesús celebró su tradicional Día de Acción de Gracias junto a las personas sin hogar, reafirmando su compromiso con las comunidades más vulnerables de Puerto Rico. Con 38 años de servicio ininterrumpido, esta organización sin fines de lucro sigue siendo un pilar esencial en la lucha contra el sinhogarismo y la exclusión social en la isla.

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Josué Maysonet, director ejecutivo de La Fondita de Jesús, destacó a Metro la importancia de este día para los participantes. “Este espacio es más que una celebración; es un recordatorio de que somos familia y de que estamos aquí para transformar vidas”, expresó.

Durante el evento, se ofrecieron alimentos, actividades recreativas y una misa tradicional, en un ambiente festivo que brindó seguridad y acogida a todos los asistentes.

La Fondita de Jesús ha enfrentado retos significativos en los últimos años, reflejo de la crisis socioeconómica que afecta al país.

Según Maysonet, se ha registrado un aumento del 20% en la cantidad de personas que buscan ayuda, muchas de ellas enfrentando el sinhogarismo por primera vez. “Estamos viendo familias enteras, adultos mayores y víctimas de violencia de género que llegan a nuestras puertas en busca de apoyo. Los altos costos de vida, el desempleo y los desalojos son algunas de las principales causas que los llevan a esta situación”, detalló.

En respuesta a estas necesidades, la organización lanzó en 2024 un programa dedicado al sinhogarismo familiar, que ya ha comenzado a atender a numerosas familias con menores en riesgo. A pesar de los avances, subrayó los desafíos que enfrentan para mantener los recursos necesarios, tanto económicos como humanos, para continuar su labor.

Además de ofrecer servicios dentro de sus instalaciones, La Fondita de Jesús lleva alimentos calientes a comunidades vulnerables, incluyendo adultos mayores en sectores desatendidos, y distribuye compras de emergencia acompañadas de servicios de salud en todo Puerto Rico.

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“La Fondita de Jesús es más que un lugar donde se brinda comida; es un espacio para transformar vidas, ofrecer segundas oportunidades y devolver la dignidad a quienes han perdido todo”, señaló el director ejecutivo.

El evento del Día de Acción de Gracias no solo celebró la resiliencia de las personas sin hogar, sino también el compromiso de La Fondita de Jesús de continuar siendo una luz de esperanza en momentos de incertidumbre. Maysonet cerró con un mensaje lleno de fe y determinación: “Hoy celebramos, damos gracias y reafirmamos nuestro compromiso de servir. Somos la familia de todos y seguiremos siéndolo”.

La crisis socioeconómica y el impacto en la población sin hogar

La situación en Puerto Rico refleja una realidad preocupante. La inflación, los altos costos de arrendamiento y la falta de empleo han llevado a muchas familias a una encrucijada, enfrentando decisiones imposibles entre pagar la renta, comprar medicamentos o garantizar la educación de sus hijos.

A esto se suma el aumento en la población migrante que, por diversas razones, termina en situación de calle. El ejecutivo enfatizó la importancia de atender esta problemática de manera integral y con sensibilidad hacia las diversas circunstancias que llevan a las personas a perder su hogar.

Con más de tres décadas de trayectoria, La Fondita de Jesús continúa marcando la diferencia, no solo ofreciendo alimentos y servicios básicos, sino también construyendo un futuro con dignidad y esperanza para quienes más lo necesitan.

Un llamado a la acción

En tiempos de crisis, el papel de organizaciones como La Fondita de Jesús se vuelve crucial. Sin embargo, los recursos son cada vez más limitados. “No todo el mundo está dispuesto a trabajar en organizaciones que sirven a poblaciones vulnerables. Necesitamos el apoyo de todos para seguir adelante”, afirmó.

El Día de Acción de Gracias es solo una muestra del impacto que esta organización tiene en la vida de miles de personas. Pero el compromiso de La Fondita de Jesús va mucho más allá: es un compromiso diario con la humanidad y la solidaridad.

Para más información sobre cómo apoyar a La Fondita de Jesús, puede visitar su página web o acercarse a sus instalaciones en San Juan. Cada contribución, ya sea de tiempo, dinero o recursos, ayuda a mantener viva esta misión de transformar vidas y crear comunidad.

La Fondita brinda servicios esenciales (alimentos, duchas, ropa, recreación, transporte, etc.), servicios psicosociales y de salud, viviendas asequibles, adecuadas y seguras, organización comunitaria, desarrollo de capacidades y ayuda en casos de desastre, y empoderamos a los ciudadanos, promoviendo al mismo tiempo la equidad y la justicia social.

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